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Si quieres ser una persona de alto valor, independiente, feliz, autosuficiente, íntegra, digna, y, ser capaz de atraer, enamorar, seducir… tienes que tener algo qué ofrecer.
No puedes evadir esto, no hay atajo que permita saltar esto y no hay primer paso que no sea este… Tienes que tener algo qué ofrecer.
Ese es el combustible que activa los engranajes sociales y hace que el sistema completo funcione.
Es ida y vuelta, es beneficio mutuo, es la moneda de cambio qué ofrecer para que la persona que tanto te interesa, esté feliz de darte lo que tú quieres.
Es, tener algo que lo demás quieran, y, para no equivocarte, apostar a ser fuente de valor universal, el que nadie podría despreciar, el que todo el mundo desea, por el que todos darían hasta la vida.
Ok, ¿y qué es?…, ¿conoces a alguien que no quiera experimentar más y más, bienestar, y placer, y valía?, ¿alguien que no lo desee, que no lo busque, que no se ponga feliz si lo tiene? Yo no.
De hecho, cada deseo particular, de cada persona única sobre la faz de la tierra… ser exitoso, atractivo, millonario, famoso, doctor, escritor, abogado, arquitecto, gran padre, gran madre… es una forma de esto.
¿Te llenarían de felicidad ese ascenso, ese logro, ese propósito, el primer beso enamorado de esa persona especial, hacer el amor con ella y amanecer juntos, que te diga que eres su máximo y que nunca había sentido por nadie lo que siente por ti?
Si sí, es porque son fuentes de bienestar, placer y valía para ti, y, repito, no existe en la historia de la humanidad, nada que deseemos más que eso, o si crees que sí, coméntalo.
Ahora… Y si tú pudieras ser fuente para otros, de eso que desean hasta con la vida, ¿te imaginas lo que ellos harían y darían por ti? Para mí, eso es ser una persona de verdadero alto valor, poseer tú esa moneda de cambio.
Y luego, ¿la posees?, ¿la tienes?, porque si no, lo siguiente es duro.
Esperar de una persona, su atención, su atracción, su interés, su amor, su dedicación, su tiempo… Sólo porque tú lo quieres, porque te gustaría, porque lo deseas con todas las fuerzas de tu enamorado corazón… Sin tener, tú, algo igual de valioso qué ofrecer… Pues, simplemente, no es realista, no es probable, no va a pasar, no existe.
Y, si tú crees que tomarás de los demás, sin tener nada que ofrecer a cambio, ese es un súper fantasioso cuento de hadas.
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Ok, ya entendiste, sí estamos conectados… ¿Cómo empezar a generar valor para intercambiar?, ¿cómo ser un hombre o mujer alfa de alto valor?
Bueno, digamos que el nivel palitos y bolitas uno, de cómo tener un gran valor, empieza aquí.
¿Listo?, toma papel y pluma y prepárate a ser sincero contigo y empezar a escribir…
Titula una hoja “bienestar”, y empieza a anotar una lista de cada cosa que desees, necesitas, y creas que podría mejorar tu vida y aportar a tu propio sentido de bienestar.
No importa si es algo grande o pequeño, general o específico, difícil o fácil, lejano o cercano. No importa si te sientes capaz o no de obtenerlo. No importa si toda la vida has creído que no lo mereces o algo similar. No importa nada con un carajo, escribe.
Como si fueran una lista de deseos que te serán todos concedidos y sólo tuvieras que escribirlos.
“Quiero ser más seguro de mí mismo…”, “quiero tener mucha más energía…”, “quiero tener buenos hábitos…”, “quiero sentirme feliz…”, “quiero tener más tiempo de calidad para mí…”, “quiero tener más y mejores amigos…”, “quiero vivir en otro lugar…”…
Escribe, y si puedes ser más específico, mejor.
Entre más escribas, más vas a sumergirte, más vas a conectar y profundizar, más zonas olvidadas en tu mente vas a iluminar otra vez, más deseos profundos pequeños y grandes revivirás, descubrirás, y más honesto contigo serás.
Yo te di estos ejemplos, pero, no importan, los que importan son los que tú escribas, esos nadie lo hará mejor que tú, son tuyos, sólo tú de verdad sabes qué sientes y qué en el fondo haría tus ojos brillar.
¿Listo?, ahora con “placer”.
“Quiero reír, divertirme…”, “quiero conocer más lugares, nuevas personas…”, “quiero experimentar amor y sexualidad al máximo, como un dios…”, “quiero hacer más cosas que me apasionen…”, “quiero levantarme emocionado de lo que pasará cada día…”, “quiero estar motivado, vivo…”, “quiero sentir…”…
Luego, la última lista, “valía”.
“Quiero sentirme querido…”, “quiero saber que soy capaz de lo que sea…”, “quiero ser importante, interesante…”, “quiero ser un líder…”, “quiero gustar más…”, “quiero tener un cuerpo bonito, quiero ser físicamente atractivo…”, “quiero ser más sociable…”, “quiero llamar la atención donde sea que me pare…”, “quiero gustarme a mí…”…
No pienses, no analices, no te detengas, no te juzgues. Escribe, sincérate, acábate la tinta, ¿qué puedes perder?
Lo que hay en tu mente, ponlo en papel. No te preocupes si lo que escribes va o no en la lista correcta. Todo lo que anhelamos en la vida y es vital para nosotros es una combinación de bienestar, placer y valía, y en cada persona tiene formas distintas.
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¿Ya lo hiciste?, ahora, lo que realmente importa es identificar y elegir, de entre todo lo que escribiste, lo más esencial, importante, necesario, urgente, y que más impacto tendría para ti si ya fuese tuyo y estuviera en tu vida.
¿Listo, lista, ya quedó?, pues ahora sí, lo que era obvio.
Manos a la obra, empieza a planear y accionar dirección hacia allá, hacia palomear esas listas, hacia construir tus sinceros deseos, lo cual, te advierto, nunca debería ser una tarea temporal, sino un propósito permanente de vida, tu vida entera.
Sé que sonará a simples palabras, pero, no puedes ni siquiera imaginar el impacto, ni la radical diferencia de vida, entre quien ya hace esto, y quien no se ha dado ni el tiempo a pensar, qué quiere.
Si empiezas aquí, te lo prometo, tendrá un impacto sublime en tu vida entera, pero no necesitas creerlo, sólo empieza a caminar hacia allá. Creerás cuando lo hagas, y veas y sientas su impacto.
Ahora, volvamos, y reflexiona.
Cada cosa que a ti te parece atractiva de otra persona, es una expresión de valor, una combinación de bienestar, y placer y valía, y lo que te atrae, es percibir el impacto que esa persona y ese valor podría tener en tu vida.
¿Te gusta una persona sonriente?, es expresión de bienestar.
¿Te gustaría un compañero romántico, sexual… cálido, cariñoso, agradable, divertido, sensual?, es expresión de placer.
¿Te atrae, te gusta la gente inteligente, interesante, sexy, sociable?, es expresión de valía.
Y, bienestar, placer, valía, BPV, es el motor de la vida.
Esta es exacta la primera lección de mi libro “Enamora Su Mente – Lecciones”, cualquier relación exitosa empieza por aquí. ¡Arre!
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