“Estoy devastado. Acabo de salir de una relación tormentosa pero no dejo de pensar en mi ex. Sé que no era lo mejor para mí, pero aún así no dejo de llorar y extrañarle. Estoy sufriendo. ¿Cómo puedo superar esto y volver a sentirme feliz y seguro de mí mismo?”
[¡Convierte Tu Dolor En Acciones!]
Si de verdad te sientes tan mal. Aprovéchalo. El dolor se puede convertir en coraje. El coraje, en acciones. Y las acciones… En lo que tú quieras.
Pero, acciones… No promesas. No ilusiones. No deseos. ¡Acciones!
Si duele… Es la vida gritándote que aprendas de tus errores. Diciendo que necesitas volverte mejor. ¡Esa es la oportunidad!
¡Ve, y rescátate, a ti mismo! Mírate a ti mismo y ayúdate a ti. Así duela. Así te dé miedo. Así no tengas ganas. Porque no va a alcanzarte para nada en la vida si no estás bien.
[¡Tranquilízate!]
Lo primero que tienes que hacer en tiempos difíciles, es: Tranquilizarte. Porque es bien fácil hacer tonterías.
¿Quieres una guía para no equivocarte? La integridad vale tanto como la vida. El amor propio es requisito de todo. Sin dignidad no se llega a ningún lado. Y no, nunca vas a arrepentirte de hacer, lo que sea necesario, para estar bien.
[¡Ocúpate Para Evitar Errores!]
Si lo que te sobra es, tiempo, para pensar en tu ex… Vas a pensar tonterías. Vas a hacer tonterías. Y ya te veo pronto regresando, humillado, suplicando por otra oportunidad. Aún… Si no deberías ser tú quien la pida. ¡Ocúpate!
[¡Enfócate En Ti!]
Cuando tienes el corazón roto. Lo que necesitas son, acciones, enfocadas, en ti. ¡No abandonarte! Además… Si vas a provocar algo en esa persona… No será haciendo cosas por ella. Sino… ¡Haciéndolas por ti mismo!
[¡Cambia Las Preguntas!]
¿Y si se enamora de alguien más? ¿Y si nunca más quiere volver conmigo? ¿Y si le pierdo para siempre? Pregunta: De verdad… ¿Tan poca cosa te sientes?
¿Crees que no podrías ser tú quien se enamore de alguien más? ¿A quien le haga bien terminar? ¿Quien ya no quiera volver? ¿A quien hayan perdido?
«Es que, tengo miedo». ¿Y sabes qué también tienes? Tienes manos como para trabajar y pagarte la mensualidad del gimnasio. Y tienes piernas como para ir, desquitar ahí tu tristeza, recuperarte y aprovechar tu tiempo. Y si esa forma no es tu estilo, como sea… Piensas. ¡Tu cerebro sí funciona! ¡Encuentra una forma!
[¡No Te Equivoques Más!]
Puede que estés pasando por un momento difícil. Puede que sientas que el mundo se derrumba delante de ti. Sí. Y precisamente por eso no debes equivocarte más ahogándote con lo mismo. ¡No puedes! ¡Porque eso lo empeora!
¡Ocúpate en otra cosa! ¡Haz otra cosa! ¡Pon tu atención en algo distinto! Luego vuelve… Desahogado las cosas se ven diferentes. ¡Desahogado sí se ven las soluciones!
[¡Supéralo!]
Vas a salir de esto. Vas a superar a esa persona. Vas a volver a sentirte seguro de ti. Vas a ser feliz otra vez. Y, si lo quieres, y si quieres que sea pronto. Deja de lamentarte. Deja de dar lástima. Deja de torturarte día y noche imaginando que esa persona era, quien no es. O que tenían un futuro, que no tenían. O que su relación era perfecta, cuando no lo era. Porque si algo de eso fuera cierto. ¿Por qué no están juntos?
