Si Tienen Estas 3 Cualidades ¡Estarán Juntos Para Siempre!

1953

¿Estás enamorado?, ¿ves en tu pareja a una gran persona?, ¿te gusta que esté en tu vida?, ¿quieres que siga en tu vida?, ¿quieres que la intensidad de las emociones que experimentan siga tan viva en algunos años como lo es ahora?

Ok, esto es para ti. Es verdad que no lo es todo, pero estos tres son grandes pilares de inteligencia emocional para que tu relación funcione perfecto.

1. La atracción no nace y vive por sí sola, vive porque tú la despiertas, entonces, sé alguien por quien tu pareja pueda sentir orgullo y una gran admiración permanentes.

Error número 1: Muchas veces, la gente, porque desea conservar el amor de su pareja, lo que hace es desvivirse, volverse súper servicial y tratar de satisfacer siempre en todo, pero en la vida real, trata de recordar… ¿cómo has visto que esto se traduzca?, ¿funciona?, no.

Error número 2: El extremo contrario, creer que si en algún momento sientes a tu pareja absolutamente enamorada, perdida, loca, fascinada por ti, significa que siempre estará así y que ya no hay nada que cuidar, pero… ¿de casualidad alguna vez has sabido de alguien a quien amaban, hasta que de repente ya no?

Error número 3: Creer que una mascota se debe cuidar con inteligencia, creer que tu casa se debe cuidar, creer que un carro se cuida, pero creer que el amor y la relación con tu pareja, no. Creer que no se necesita inteligencia ni cuidado para que una relación crezca.

Sí, sí, sí, en teoría, esperamos que el amor dure para siempre porque eso suena bien, ¿o no?, pero… en lo que has vivido en carne propia, o por lo menos en lo que has visto… ¿el amor dura para siempre?, la mayoría de las veces, no.

Es aquí donde debes poner acción e inteligencia, porque, como ya he dicho antes… amor, inocencia y buenas intenciones, son cualidades maravillosas, pero no bastan. Entonces, no te duermas nunca en tus laureles. Sé alguien que despierta orgullo, admiración y una gran atracción, siempre.

Aparte de que seas súper sexual, romántico, o divertido, o lo que seas… me refiero a que seas la opción más obvia e inteligente, me refiero a que seas el tipo de mujer u hombre que querría cualquiera, no sólo tu pareja.

Obsérvalo desde tu punto de vista… ¿No te gustaría que tu pareja fuera la más atractiva, la más inteligente, la más carismática o la más exitosa… justo alguien de quien pudieras sentir muchísimo orgullo?

Entonces, dedicarte, enfocarte a seguir creciendo siempre, aunque pareciera que estás viendo sólo por ti, no es cierto, estás viendo por la relación. Suena curioso, pero, estarás haciendo de la pareja de tu pareja, una grandiosa, maravillosa persona.

2. Una relación, no sólo hay que construirla, también hay que evitar aquello que la destruye.

Cuando estés conociendo más íntimamente a una persona, conviviendo más a fondo, relacionándote con ella, no todo será color de rosa. Habrá algo que no va a gustarte tanto de tu pareja, o que a ella no le va a gustar tanto de ti, un malentendido, alguna diferencia, no sé… esto pasa.

Entonces… ¿Qué puede destruir una relación? Entre otras cosas, no saber ver, entender y arreglar las diferencias, y, muchísimo peor aún, no pensar, y responder de forma reactiva a algo que no te gustó o que no te hizo sentir bien.

Ser reactivo significa que tu respuesta a las cosas no es pensada, es simplemente emocional… ¿Y, qué pasaría si en algún momento sientes celos, enojo, miedo, ansiedad, tristeza o lo que sea y eso dirige tus acciones?

Nada bueno, porque nunca saldrá lo mejor de ti cuando seas dirigido por emociones negativas o destructivas.

¿Quieres tu actitud más proactiva, productiva, creativa e inteligente? Entonces no seas reactivo a algo que no te gustó, a algo quizás egoísta o que talvez te hizo sentir mal pero que muy probablemente no llevaba esa intención.

Lo diré muy claro, si tu pareja te hizo, quizás sin darse cuenta, no le hagas para vengarte, para que sepa cómo se siente, para desquitarte, para mostrarle tu poder, para enseñarle que contigo nadie se mete, para sentir alivio instantáneo.

No, no, no, no, no. No respondas reactiva y agresivamente a algo que no te gustó. No respondas desde el dolor o el enojo.

Y, no estoy diciendo que no hagas nada, sí lo harás, sólo que no debes dejarte llevar por emociones negativas. No son buenas consejeras, ni siquiera son un placebo, no sólo no arreglan nada sino que empeoran las cosas.

Pídele hablar en otro momento, cuando estén libres de emociones negativas, cuando estén ecuánimes, cuando hayan reflexionado. Si arreglan con inteligencia algo malo que paso, evitarán que pase de nuevo, y entonces la relación será resiliente.

En cambio, si sólo fueran reactivos, harías, te harían, harías de vuelta, te harían de vuelta, y ya habrían destrozado todo el sentido de una relación.

3. Son equipo, y si la relación funciona es porque el equipo funciona.

Sí, me refiero a que construyan juntos, se diviertan juntos, la pasen bien juntos, hagan cosas placenteras y emocionantes juntos, a que debe haber comunicación, confianza, etcétera, pero eso es muy obvio.

Hay algo más importante y que casi nunca consideramos cuando pensamos en equipo. La esencia de un equipo es que cada integrante tiene razones propias, personales, para estar ahí.

Quiero decir… La relación no se trata sobre ti, sobre lo que tú quieres, lo que a ti te conviene, lo que a ti te gustaría. La relación trata sobre ambos, lo que a ambos les conviene, lo que ambos quieren, lo que a ambos les gustaría.

Si en algún momento te olvidaras de esto, y te dejaras llevar por una versión de ti egocéntrica, demandante de atención, acaparadora, necesitada, y creyeras que la relación se trata únicamente sobre lo que tú sientes, en ese momento comenzaría la cuenta regresiva de una relación que tiene sus días contados.

Para que quede más claro… Lo que tú quieres, lo que a ti te gusta, tus planes, no son lo único que importa. Tu pareja también tiene gustos, planes, deseos. Si crees que la relación se trata sólo sobre tus necesidades emocionales, no. Si crees que la relación se trata sólo sobre tus necesidades sexuales, tampoco.

Y, atención. No significa que ahora te pases al otro extremo y entonces creas que lo único que importa son los deseos de tu pareja porque tampoco funciona así.

Quizás no se nota enseguida pero cuando una relación pierde su equilibrio, desde ese punto empieza a divergir, y… ¿Quieres que la relación funcione? Entonces no debe divergir, no deben creer que van juntos cuando en realidad ya no.

Son equipo. Que seguir juntos no sea porque son novios, y deben, no sea porque tienen un compromiso, y deben, no sea porque existiese un papel, y deben, nunca porque deben, nunca porque sea obligatorio, sino porque van hacia el mismo sitio y lo hacen mucho mejor juntos.

4. Cuidar una relación requiere de la inteligencia de ambos, pero basta con que uno vaya en otra dirección o a otra velocidad, para que la relación a largo plazo no funcione, y por eso muchas relaciones no funcionan.

Entonces, grábate muy bien este punto extra. Sonará frío y quizás no va a gustarte porque además no solemos pensar de esa manera, pero al final, todo se trata de valía.

En cada momento de la relación, ambos deben ser y sentir que valen tanto como el otro, que son tan importantes, tan queridos y tan irremplazables como el otro, ambos deben seguir proyectando su valía para ser percibidos valiosos, y si esto no es así, trabájenlo.

Ejemplo: ¿Sientes que tu pareja depende de ti, se siente pequeña y es frágil frente a ti? Eso es muy mal síntoma para una relación, significa que la ves o por alguna razón ella se cree menos valiosa que tú. Necesita reparación urgente, ¿y sabes cuál es?, ella necesita crecer un chingo.

El caso contrario… ¿Sientes que tu pareja es mucho para ti, o que no eres suficiente, o constantemente sientes celos e inseguridad porque se podría fijar en alguien más? Mal, muy mal. Significa que te percibes menos valioso y eres tú quien necesita crecer un chingo.

Esto es súper común en las relaciones, que no haya equilibrio, o que alguien sienta que ama más, que invierte más, y, aquí es muy fácil, si sientes que inviertes más, ahora debes invertir, pero en ti.

Dedícate 200% a crecer un chingo, física, emocional, intelectualmente, métete al gimnasio, ponte papísimo, buenísima, desarróllate a ti, porque, ¿qué crees?, que el cariño no se pide, el interés, la reciprocidad, el ser relevante, no se piden.

Todos esos bellos sentimientos que quieres despertar en alguien más, responden directamente a tu valía, y si no lo crees, piensa… ¿no es cuando ves a una persona más valiosa, más segura, apasionada, interesante, autosuficiente, atractiva, brillante… cuando más sentimientos despierta dentro de ti?

Aceptar la realidad de que debes crecer, puede que no sea sencillo, pero, reiníciate y acéptala, porque, no sólo está bien, es perfecto, ¿o cómo le llamarías a que el requisito para que una relación funcione, sea que debes crecer tú, debe crecer tu pareja, y deben crecer juntos? ¿No es, en serio, el requisito perfecto?

Y lo sé, sé que no suena nada romántico hablar de valía cuando hablas de relaciones, pero sería ingenuo, e hilarantemente inocente ignorar que todas las relaciones sociales se tratan sobre valía. Si puedes ver esto, todo tu mundo será más claro y transparente, y ya me dirás tú, en el futuro, si no lo valió. ¡Arre!

Entra a mi página, si te interesa tomar un curso o entrenamiento con nosotros.

Comparte el video, si crees que es útil para alguien que estimas. Y suscríbete y activa la campanita si quieres que nos veamos de nuevo.

Deja tu Me gusta si quieres que hable más sobre temas como este. Y comenta, ya sabes que me gustaría saber qué piensas. Hasta pronto, y recuerda que todo lo que haces te convierte en quien verdaderamente eres.

Artículo anterior¿Qué Odian Ellas De Los Chicos Buenos?
Artículo siguienteCómo Hablar Con El Chico O Chica Que Te Gusta Y Que La Primera Cita No Sea La Última